lunes, 11 de febrero de 2013

Todo lleva su tiempo...

Cuando terminamos una relación, o tal vez debería decir "cuando la terminan por nosotros", la tristeza, la rabia, la impotencia... nos vuelve irracionales. 
Empezamos dando vueltas y más vueltas...a cada frase, cada detalle... diciendonos que intentamos comprender, cuando en realidad, lo único que hacemos es restregarnos en nuestro propio dolor, y hacerlo más intenso.
Una vez pasada esa etapa, nos empeñamos en "olvidar", en "estar bien"... sin darnos cuenta de que eso, en realidad, es inútil. Uno no está bien porque quiera estarlo, ni porque haga como si sus heridas no existiesen... Todo lleva su tiempo, y si bien es cierto que no puedes "abandonarte" y dejar que la tristeza te gane la partida... tampoco puedes "forzarte" a superar algo, ni engañarte a ti mismo diciendo que lo estás, cuando en realidad el dolor sigue ahí...
Tienes que asumir que duele, que dolerá durante un tiempo...y aún así, seguir adelante. El tiempo, los nuevos proyectos, las personas que te rodean, las que vayan apareciendo... y tu propia fuerza, hará que, un día, casi sin darte cuenta, la herida haya cicatrizado.
Pero no puedes forzar las cosas, porque si "retomas" tu vida sin asumir que aún estás lastimado...si tratas de aparentar que todo va bien, cuando en realidad no es así... caminarás sin rumbo, buscando inconscientemente algo que, en realidad, ya no está.

viernes, 8 de febrero de 2013

Yo, yo, y después...yo

En los últimos tiempos, mi SL ha sufrido algunos cambios... el balance general es positivo, pero seria una hipócrita si pretendiese que todo lo que me pasa, siempre es bueno. 
He conocido gente nueva, he hecho nuevos amigos...y también he perdido algunos. Hace poco tiempo, una de esas personas me dijo que para mi ella era una "amiga de segunda". 
Yo nunca he tenido "categorías" de amigos. Como todos, hay personas más cercanas, y otras que lo son menos... Amigos con los que tienes un trato más esporádico, y otros con los que el trato es casi diario... Incluso con la misma persona, eso puede ir "por rachas", dependiendo de las obligaciones, intereses, etc de ambos...
Lo que no deja de sorprenderme, es que las personas "valoren" la amistad, en función de cuantas veces te ven, de si hablan contigo a diario (incluso aunque sea de cosas absurdas), o de que les des la razón como a los locos aunque creas que no la tienen. 
Se nos olvida que, ésta vida, tenemos que "compaginarla" con la primera... Lo que conlleva que uno no siempre tiene tiempo, o no siempre tiene ánimos... que algunas veces, tiene en la cabeza problemas más serios que un mesh que no me carga, o un tp que no me funciona...
Que además, cada uno de nosotros, nos relacionamos de diferente forma, con diferentes personas...es decir, NO ERES LA UNICA PERSONA EN EL METAVERSO. 
Por otro lado, también cada uno tenemos nuestros tiempos, nuestros hobbies... y lo mismo que, quizás para ti no sea un buen momento cuando te abren un im y estás pinchando en una disco, haciendo rp, o editandote tus ultimas pestañas mesh...; para el otro también puede no ser un buen momento, cuando está hablando con alguien, tomando una foto, o sencillamente cansado y con la neurona a medio gas.
Yo a lo mejor es que soy muy rara, por lo de ser rubia y tal... pero nunca me he ofendido porque no abran im a diario, o porque no me hagan la ola si se me ocurre afirmar porque yo lo valgo, que la tierra es plana y el centro del universo es mi ombligo...
Sinceramente, yo, como todos, tengo mis días y mis épocas... Momentos en que soy un ser social por naturaleza, y otros en que me transformo en alguien totalmente antisocial... No es que quiera a la gente más ni menos... es algo tan sencillo, como que en ocasiones me "saturo" y necesito recuperarme, recargar las pilas, y disfrutar de un poco de espacio vital, sin sentirme "obligada" a abrir 50 ims para que nadie se ofenda...
Igual deberíamos repasar conceptos, como en Barrio Sésamo, para tener más clara la diferencia entre "querer" a alguien (y que te importe), o tener que adorar el suelo por donde pisa la gente y vivir pendiente de cada uno de sus pestañeos...

viernes, 1 de febrero de 2013

Trucos de pareja: “No exijas para hoy...”

Magical Confidences
“Magical Confidences”

(basada en la nueva pose “Confidences” de la tienda ZIPI Poses)

Trucos de pareja: No exijas para hoy lo que podáis hacer mañana”


- “Es que yo quiero ir a bailar HOY”
- “Es que estoy cachondo AHORA”

Cuando le dices cosas así a tu pareja, ¿te planteas primero si está de humor? ¿Si está bien, si necesita descansar, si tiene algo que contarte...?

Aunque rara vez nos demos cuenta, una de las cosas que más apreciamos todos en el otro es que no nos agobie, que nos deje nuestro espacio, que respete nuestro ritmo y nuestros estados de ánimo. Entonces, ¿por qué tan a menudo cuando deseamos o necesitamos algo del otro, estamos dispuestos a mirar sólo por nosotros mismos, y nos decepcionamos y nos ponemos de morros si el otro no accede inmediatamente y sin reservas? ¿Por qué nos resulta tan fácil pedir comprensión pero nos cuesta tanto darla, incluso a la persona que se supone que más queremos?

Una relación de pareja no consiste sólo en intercambiarse los regalos, los favores y los gestos más obvios; no se basa únicamente en seguir a rajatabla una serie de actividades programadas y demostraciones de amor supuestamente “necesarias”. Lo único realmente necesario para que funcione es amar sinceramente al otro... y aunque dicho así seguro que hasta el más obtuso se mostraría de acuerdo y tal vez protestaría diciendo que “¡eso es evidente!”... a la hora de la verdad, incluso los no tan obtusos terminamos olvidándolo muchas veces, y el egoísmo nos hace resentirnos cuando el otro no hace todo lo que queremos, cuando lo queremos y como lo queremos.


La próxima vez que quieras algo de tu pareja, no se lo pidas inmediatamente nada más verla; en lugar de eso, ofrécele lo que tú tienes para ella: salúdala, pregúntale qué tal está, cómo le ha ido el día, qué cosas le han hecho feliz y cuáles le han desanimado; y si ves en ella la más mínima sombra de tristeza o desaliento, ofrécele tu mano, tu abrazo y tu sonrisa, escúchala pacientemente intentando comprender, y no pares hasta notar que termina sintiéndose mejor... lleve el tiempo que lleve.

Te sorprenderá cuán a menudo, tras hacerlo así, tras dar antes que recibir, la encontrarás más dispuesta a ofrecerte por sí misma lo que anhelabas ;-)